El milenario arte del Feng Shui propone que cada ser vivo está regido, desde lo energético, con un número designado a partir del año de su nacimiento. Este número logra explicar las tendencias de la persona, las cuales pueden ser aprovechadas para realizar los cambios necesarios para, por ejemplo, elevar su productividad laboral y su desarrollo profesional.
El Feng Shui se basa en la definición de espacios y en la orientación de los mismos. El número Kua te permite conocer estas cuatro orientaciones más propicias para ti, para poder así definir la ambientación de tu área de trabajo.
Existe una fórmula sencilla para conocer tu número Kua. Para ello, debemos tomar los dos últimos números del año de nuestro nacimiento, y sumarlos hasta reducirlos a un dígito. Por ejemplo, si has nacido en 1975, entonces sumas 7 + 5 = 12; luego 1 + 2 = 3. Si eres hombre, debes restar este número al 10 para obtener tu número Kua. Si eres mujer, debes sumar 5 a este dígito. Así, la fórmula para un hombre sería así:
1975
7 + 5 = 12;
1 + 2 = 3
10 – 3 = 7
7 es el número Kua de un hombre nacido en 1975.
Para una mujer, sería:
1975
7 + 5 =12
1 + 2 = 3
3 + 5 = 8
8 es el número Kua de una mujer nacida en 1975.
Si tu número Kua es 1, 3, 4 o 9, debes colocar tu escritorio de modo de quedar de frente a los puntos cardinales específicos, menos al Oeste, es decir: directamente al Norte, Sur, Este, o también al sudeste.
Si, en cambio, tu número Kua es 2, 5, 6, 7 u 8, debes elegir una decoración del ambiente que te permita quedar frente a los intermedios entre puntos cardinales, como el Sudoeste, el Noroeste, el Nordeste, o también al Oeste.
Definida esta ubicación, estarás sabiendo la ubicación del denominado Fénix (al frente). Luego, debes completar la ambientación, según la siguiente noción: el Tigre va a tu derecha, la Tortuga detrás, y el Dragón a tu izquierda.
La Tortuga es nuestro respaldo y apoyo. Podemos representarla con nuestros diplomas, certificados, trofeos, libros de consulta, bibliotecas y demás. Nunca debemos colocar una ventana o puerta en el espacio de la Tortuga.
El Tigre es nuestro lado racional. Aquí debemos evitar el movimiento, decorando este sector con elementos estáticos y calmos, como mobiliario sin cajones, mesas de apoyo y demás.
El Dragón es nuestro lado intuitivo y emocional. Este elemento representa al Agua, y posee un lado positivo y uno negativo. Es el lado propicio para colocar las maquinarias que posean algún movimiento, como un botellón de agua, la cafetera, un ventilador, o incluso un reloj de péndulo o una pecera o acuario.
El Fénix, nuestro “horizonte”, debe ser reflejo de nuestras motivaciones. Debe ser abierto y despejado, quizás con una ventana o un bello cuadro. Coloca frente tuyo lo que refleje tus avances y motivaciones para el crecimiento, como una maqueta a escala, un plano, o un simple cuaderno de anotaciones.