Las redes sociales son un elemento infaltable en las comunicaciones empresariales de nuestros tiempos. Y, con tanto acceso al mundo de manera instantánea y tantas posibilidades de interacción, es natural que siempre haya algunos que prefieren ir haciendo el mal, hackeando los perfiles y cuentas de las empresas para su propio beneficio, o para causar un daño a la corporación.
Pero se puede establecer una seguridad más alta y resistente, incluso si no eres un gran experto en el manejo de redes sociales. Aquí te contamos algunas buenas ideas a tener en cuenta a la hora de mejorar tus defensas en la red de redes.
Siempre hablamos de adecuar los comentarios y posteos en los perfiles de redes sociales, dejando de lado los personales y poco valiosos. Pero también debes tener cuidado de la información que publicas o que colocas en tu perfil, al respecto de la privacidad de los datos.
Nunca pongas información personal o de la empresa en los perfiles de redes sociales, como dirección postal de oficinas lejanas al público, teléfonos móviles de los cargos mayores o de sectores que no sean de atención al cliente, ni datos que pudieran ser usados de manera extorsiva o de beneficio ajeno. Aunque sean simples (siquiera como con qué banco trabaja la empresa u otros similares) pues hay malvivientes muy hábiles en tomar esta información y usarla para el perjuicio de la empresa.
No aceptes todo contacto solicitado, analiza primero de quién se trata. Si conoces a la persona tu análisis será simple, aunque si le desconoces también puedes entrar a su muro y perfil, y corroborar que se trate de una persona real. Mira sus fotografías y sus comentarios, para saber que no se trata de una corporación contraria, de una empresa privada o de un perfil inventado.
También analiza bien las aplicaciones que enlazas a tu perfil. Muchos parecen inocentes y entretenidos, mientras que su funcionamiento real es el de robar tus contenidos y poder ingresar a tu perfil.