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Versión para imprimir del artículo Cómo prevenir la depresión en el trabajo. No incluye formatos especiales ni imágenes.
La depresión en el ambiente laboral puede tener las más diversas raíces y formas. Puede deberse a un sueldo insuficiente, a un constante estado de estrés y exigencias altísimas que terminan por colmar con tu paciencia y templanza, puede deberse a que no te gusta ni satisface tu trabajo, a un ambiente poco agraciado y sin motivaciones, o a una variedad de causas. Pero es posible vencer la depresión en el trabajo, sea cual fuere la forma que tome y la razón de su llegada.
Al igual que el estrés, la depresión y la angustia es una causa de incapacidad en el mercado laboral. Afecta tu salud física, minimizando tu sistema defensivo, y te predispone en un marco emocional negativo. Con su llegada se hacen visibles también la falta de motivación, una menor productividad y una baja en la moral general.
Por lo tanto, es por demás importante reconocer sus síntomas tempranos. El desgano, la falta de ímpetu, el desinterés, la falta de risas y de deleite son claras señales de una depresión en formación en cualquier empleado. Ni bien notes que no vas a trabajar con una sonrisa en el rostro y con ganas de hacerlo para ganar tu sustento y dignificarte, debes ponerte en acción para combatir esta seria enfermedad antes de que ella gane tu puesto y tu dedicación.
Si sientes desgano y depresión, angustias constantes, pena y tristeza, entonces debes analizar en profundidad tu situación laboral actual. Se objetivo a la hora de realizar este análisis, se frío y lógico al hacerlo. Debes encontrar la raíz del problema o, al menos, la más significativa de sus causas, para poder darle la solución más apropiada.
Verifica qué es lo que te brinda ese marco mental negativo, ya sea por tu cuenta, en diálogo con personas de confianza, e incluso con el departamento de personal de la corporación, si lo tuviera. La terapia psicológica es una excelente idea para hallar la causa principal de la depresión laboral, y hoy la mayoría de las corporaciones la incluyen en su cartilla de servicios de cobertura para cualquier empleado. Consulta tus posibilidades para hacer un análisis exhaustivo e integral, de modo de poder dar solución final a tus problemas de angustia.
Ya hallada la causa de raíz, puedes dar la solución más efectiva. Cambiar lo que te hace infeliz (así sea tu trabajo, por completo), modificar tus metas, cambiar tu visión sobre las cosas, pedir un traslado o la solución más apropiada te ayudará a vencer a la depresión laboral en poco tiempo, y de manera óptima.
Pero más importante aún, es prevenirla. Procura hacer de tu trabajo interesante, motivador, con un nivel de exigencias que te mantengan activo y productivo todo el día. Regulariza tus finanzas para que tus ingresos sean más que tus egresos, evitando así muchas de las angustias y temores relativos al mercado laboral. Modifica tus hábitos de vida y trabajo para hacerlos más saludables y energizantes, como ir de a pie al trabajo, tomar tu almuerzo puertas afuera si puedes, participar de las actividades de integración empresariales para formar mejores lazos laborales, o la prevención que consideres más oportuna. Cuando el trabajo es gratificante, satisfactorio, exigente y humanamente agraciado, la depresión ya no formará parte de tu día laboral, ni tampoco del personal.
