El antiguo concepto del jefe como una persona que se quedaba sentada en la oficina y que todos temían, está pasando de moda. Actualmente, los supervisores, gerentes o directivos, tienen a su alcance una nueva forma de dirigir una organización, basada en los cambios que provocó la crisis económica mundial y el avance en las condiciones de igualdad de las mujeres en el trabajo.
Por ello, los actuales jefes pueden requerir de algunos consejos para lidiar con el nuevo mundo laboral:
En la actualidad, la población femenina ha aumentado en las organizaciones, demostrando que su capacidad es equiparable a la de los hombres. Es aconsejable que permitas que más mujeres se integren a tu equipo de trabajo o que disfruten de ascensos. Sus habilidades y su visión global te serán útiles como jefe.
Tus trabajadores necesitan actualizar los conocimientos que tienen en el área en la que se desempeñan. Para lograrlo, puedes inscribirlos en cursos de capacitación impartidos en la misma empresa o por alguna institución externa. Los conocimientos frescos de los empleados aportaran una visión renovada a la toma de decisiones y a la solución de problemas de tu área o empresa.
Una causa de muchas renuncias o insatisfacción laboral es la falta de motivación en el trabajo. Esta aparece cuando los empleados no ven un futuro en su organización o una posibilidad de ascender. Examina a tus empleados y analiza quién o quiénes tienen la capacidad de tomar nuevas responsabilidades y subir de puesto. La experiencia con la que ya cuentan, te servirá de respaldo si tienen un puesto mejor.
Los empleados encuentran difícil trabajar si sus labores se ven dificultadas por distintas causas: el mal funcionamiento de equipos de oficina, como computadoras o impresoras; la falta de servicio de comida si se quedan trabajando hasta tarde; un deficiente servicio de sanitarios; la carencia de agua potable o hasta un servicio de café. Cuidar estos simples detalles puede aumentar la satisfacción y la productividad de tu personal, y por ello, tu responsabilidad es vigilar que todas estas partes de la maquinaria laboral estén funcionando correctamente.