El estilo de decoración pop, inspirado en el movimiento artístico del Pop Art, es una forma en la que podemos aportar vitalidad, entretenimiento y energía a nuestra oficina. Es ideal para oficinas activas, donde se realicen actividades creativas e inspiradoras. Aprendamos algunas formas sencillas de lograr la decoración pop en nuestro espacio de trabajo.
En este estilo de ambientación podemos dejar volar nuestra imaginación. Inspirándonos en este movimiento vanguardista, nos dejaremos llevar por los diseños divertidos, llenos de color, con toques del cómic clásico, cartelerías promocionales y demás.
El color es uno de los elementos más importantes en este estilo de ambientación. Debe ser audaz y vital, aprovechando una paleta casi infantil en mezclas astutas de colores vibrantes. Los rojos, fucsias, azules, naranjas y verdes son los protagonistas, y no han de faltar en ningún elemento, desde paredes, techos y pisos, hasta elementos decorativos y funcionales como el mobiliario, las cortinas, los adornos decorativos, los artefactos lumínicos y demás.
Los elementos en colores planos pueden combinarse a la perfección con acabados o estampados llamativos. Lunares, formas geométricas, rayas y delineados forman parte de esta decoración.
Para vestir paredes y rincones, nada como carteles publicitarios e impresiones magnificadas de recuadros de cómics y gráficas. También podemos incluir obras de arte (o imitaciones y copias, claro) de artistas emblemáticos de este movimiento, como Andy Warhol o Roy Lichtenstein.
También podemos dar una estética retro al estilo pop. Nos valdremos de lámparas con caireles, viejos ceniceros, electrodomésticos de antaño (aunque estén fuera de uso) y otros. Podemos combinar estilos de mobiliario sin condiciones, entremezclando sillas antiguas con muebles modernos, en formas lineales.
El papel tapiz es una gran manera de vestir los ambientes con un estilo pop. En el mercado podrás encontrar patrones geométricos y formas interesantes, a precios sumamente convenientes. Tampoco olvides las alfombras de pared a pared en colores llamativos, muy emblemático de las décadas de 1950 y 1960, momento de esplendor de la cultura pop.
Para dar un tinte más moderno, podemos entremezclar algunos elementos de la afamada época disco, de la década de 1970. Aunque no son elementos exclusivos de la cultura pop, su combinación aporta vitalidad al ambiente, con muchas energías, fomentando la creatividad y el buen humor durante la realización de las actividades laborales.
Finalmente, la ambientación pop debe ser entretenida. Coloca y quita los elementos que quieras, hasta sentirte completamente a gusto en este ambiente laboral con tintes de diversión.