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Versión para imprimir del artículo Cómo gestionar el tiempo en el trabajo según nuestra personalidad. No incluye formatos especiales ni imágenes.
Son muchos los consejos que podemos tener en cuenta para controlar eficazmente el tiempo en el trabajo y lograr que nos rinda más, pero un concepto que poco tenemos en cuenta y que sin dudas afecta al tiempo laboral, es la relatividad.
Todos los consejos y trucos que hemos visto en nuestro portal no son universales. Es decir, sí, están pensados en forma “universal”, pero no debemos olvidar que están aplicados a tareas realizadas por seres humanos con distintas personalidades, habilidades, necesidades y posibilidades. Entonces, ya sea que estemos buscando gestionar mejor nuestro propio tiempo, tengamos personas a cargo, o trabajemos con pares, estos consejos deben adaptarse a la realidad del ámbito en que nos desenvolvemos.
Llegamos, entonces, a la idea de que lo que debemos manejar mejor no es “el tiempo absoluto”, sino nuestro tiempo. Es decir, aprender a aprovechar mejor nuestras fortalezas, y corregir, dentro de lo posible, nuestras debilidades. Pero siempre teniendo en cuenta las necesidades personales.
Si prefieres comenzar tu día leyendo los mails de tus amigos, ¡adelante!, te ayudará a encarar las tareas con más alegría, seguramente, más allá de lo que sea una tarea “No Importante – No urgente”, según vimos en este artículo. Si trabajas en casa y tienes hijos, y te hace sentir bien interrumpir tus tareas para pasar algún tiempo con ellos en el día, ¡hazlo!. De otro modo, te sentirás mal anímicamente, y eso no ayuda.
Si tenemos gente a cargo, lo primero que deberíamos hacer es reconocer sus habilidades. Algunos serán más rápidos en determinadas actividades, pero otros cometerán menores errores. Esto es importante en el momento de delegar. La decisión de a quién asignar cada tarea dependerá del objetivo. Además, si acompañamos esto con consignas claras, evitaremos tareas duplicadas, mal realizadas, o con un rango de prioridad equivocado.
Todos necesitamos momentos de distracción, incluyendo nuestros colaboradores y pares. En este sentido, la flexibilidad será nuestro mejor aliado. Si dos personas comparten una tarea, podrán tomar descansos en forma alternativa, y dar el 100% de su atención cada uno cuando retomen la labor.
También debemos tener en cuenta que cada uno encuentra la concentración de maneras diferentes. Es bueno tener en cuenta estos detalles, para que cada persona se sienta lo más cómoda posible, lo que redundará en mayor eficiencia y mejor aprovechamiento del tiempo efectivo de trabajo.
