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Versión para imprimir del artículo Practicando para la entrevista laboral. No incluye formatos especiales ni imágenes.
La entrevista laboral es una situación altamente estresante y de rigor, para la cual puedes entrenar en la comodidad y seguridad de tu propio hogar. Para ello, es vital que te hagas (tú o alguien de confianza) las preguntas que te han hecho sentir incómodo o alterado en entrevistas previas, y luego las preguntas usuales y algunas en las que puedas pensar bien qué responder.
La idea de estos ejercicios de entrenamiento es que te liberes de los nervios y de la presión de las preguntas incómodas, tanto en su naturaleza como en un tema personal específico. De este modo, cuando llegue el momento de la entrevista real, tendrás la soltura y la agilidad de responder y salir airoso de estas difíciles situaciones, comportándote según una de las principales búsquedas de las empresas de hoy: versatilidad.
Una de las preguntas comunes en entrevistas laborales es “por qué estás allí”. Dependiendo de la situación, puede responderse desde el punto de vista de la motivación para ser parte de esa empresa, de las características del cargo en particular, o de los beneficios que representaría de acuerdo a tu situación actual.
En esta etapa de la entrevista se suele incluir preguntas sobre los detalles de tu trabajo actual o último trabajo, la razón de tu desvinculación con la empresa anterior, y tus conocimientos sobre esta nueva empresa. También se incluirán algunas preguntas convencionales, como tus conocimientos, tu educación, tus habilidades, y otras.
En la entrevista laboral no sólo te harán preguntas sobre ti, tu pasado, tus intereses y tu educación. También, y dependiendo de la empresa y del cargo, querrán saber qué tan comprometido estás con la realidad que te rodea. Puede que te pregunten la cotización actual del dólar, el nombre de algún Ministro, o bien algún dato de interés, geográfico o financiero de tu país o ciudad.
Pero puede que también quieran saber sobre un titular del periódico del día que te haya causado alguna impresión especial, o bien cuál es tu opinión sobre algún tema de actualidad. Recuerda que estas preguntas pueden ser directas o “inversas”. Por ejemplo, puede que la consulta sea sobre tu opinión del escándalo mediático del momento, para saber si en tu tiempo libre te dejas llevar por tales trivialidades. Responde siempre con sinceridad y, si desconoces del tema, hazlo saber.
En estos casos, un total descompromiso con la realidad tampoco sería bueno. Quizás la mejor respuesta sería algo como “sé que ha habido problemas entre los protagonistas, pero desconozco sus motivos, motivaciones, y los detalles del evento”, quizás agregando que “tan sólo lo sé porque mi hija/mi esposa/mi madre suele ver esa telenovela” o algo por el estilo.
Es probable que te hayan preguntado tres virtudes y tres defectos en entrevistas previas, anticipándote a tales cuestionamientos. Cuando estés pensando en tres virtudes y tres defectos, procura también pensar tres éxitos o logros que hayas tenido en tu trabajo anterior, o en tu vida, en general. Piensa, de igual modo, en situaciones extremas, para poder responder con soltura a preguntas como “¿has estado sometido a situaciones de riesgo o de presión?” u otras similares.
