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Versión para imprimir del artículo Debate y confrontación como herramientas de trabajo. No incluye formatos especiales ni imágenes.
Si mencionamos las palabras “debate” y “confrontación”, inmediatamente les asociamos a momentos de conflicto, pesares y enfrentamientos emocionales que dejan huella en las relaciones laborales. Pero, muy lejos de esta acepción, ambas palabras pueden ser valiosas herramientas para el avance en el trabajo y en cualquier proyecto.
Se dice que, si todos pensáramos igual, no habría puntos de comparación. Si sólo conociéramos un color, o si nos viéramos obligados a vivir en ese color, no sabríamos si nos gusta más o menos que otro, si nos resulta más productivo, si es de mayor o menor beneficio o, peor aún: si nos está siendo perjudicial.
Tal es la importancia del debate y de la confrontación, de la existencia de puntos de vista y opiniones diferentes. La distinción es lo que permite más ideas.
Para que estas dos herramientas de avance existan en el trabajo o en la oficina, es imperativo que haya respeto. Una corporación con una cultura de respeto y tolerancia es el único escenario de avance posible en estos casos, pues un sitio que prioriza el avance individual y el enfrentamiento como modo de resalte individual no creará las situaciones más apropiadas para que se presenten las oportunidades y se evalúen las opciones de la manera más provechosa.
Para que el debate y la confrontación puedan tomar presencia en la forma del respeto y el crecimiento, se necesita practicar y tomar las riendas de la situación. Algunos países de avanzada, incluso, toman al debate y la confrontación como métodos educativos desde temprana edad, aprendiendo así sobre la tolerancia y el respeto hacia el contrincante, el contendiente que defiende el punto de vista contrario, siquiera diferente, del que tiene una persona.
Para practicar el debate en la oficina puedes organizar talleres con la regularidad que prefieras, en los que los miembros se dividirán en equipos (un número par, dos como mínimo), recibiendo instrucciones de investigar y defender un punto de vista sobre una situación existente. Los casos escenario de problemas en busca de soluciones son ideales también en estos casos, pues motivan a la propuesta de soluciones y a la confrontación de las mismas, premiándose a todos los participantes con la posibilidad de ejecutar la solución concretada entre ambas partes.
Utiliza la tensión y la defensa de las propias ideas como herramientas de crecimiento en la corporación. Con poca práctica, los miembros aprenderán estas herramientas y podrán aplicarlas en el día a día, buscando convencer a clientes y proveedores, proponiendo nuevas soluciones y metodologías, y acordando sobre las opciones más provechosas para el objetivo conjunto.
