Ventana de Windows gigante para decorar tu oficina.

Ventana virtual de Windows

Durante los últimos años, en entorno visual del sistema operativo Windows ha sido casi un decorado fijo en nuestras vidas. Hay una inmensa cantidad de personas que optan por Windows en lugar de Mac, y el entorno es un fijo entre miles y miles de pantallas. Por eso, ¿por qué no incorporarlo también a nuestro entorno tridimensional?

Esta idea permite crear tu propia ventana de Windows en tu habitación, en tu oficina o en donde quieras, y resulta ideal para los espacios de oficinas hogareñas o para tu oficina fuera de casa, si se te lo permite. También es ideal para complementar tu decoración laboral, resultando atractivo para tus clientes y tan motivador como entretenido para tus empleados.

Realizarla es sencillo, y sólo requiere de conseguir los materiales adecuados para darle vida real a este entorno virtual. Hoy te contaremos tres maneras de lograr este decorado: pintándolo, aplicando recortes de vinilo, o aplicando vinilo impreso en taller.

Tres maneras de crear tu propia ventana de Windows

Para pintar este entorno, utilizaremos tanto esmaltes sintéticos (o pintura de látex) para los marcos, y laca vitral para los cristales. Primero, haz una captura de pantalla del entorno básico de Windows (o moldea tu entorno con las carpetas deseadas y la paleta de colores que prefieras) e imprime esta captura en una hoja A4 para utilizar como referencia. Luego, puedes enviar a hacer una ampliación o aplicar la técnica de cuadriculado para expandir esta imagen al tamaño de la ventana que quieras remozar.

Marca las bases del diseño con lápiz, y coloca los enmarcados con cinta de pintor autoadhesiva para facilitar la labor. Remarca todos los detalles que prefieras, y aplica la pintura elegida dejando secar entre las capas de base y las capas accesorias o decorativas.

Retira los cristales y dibuja el entorno por el envés con rotulador a base de agua. Voltéalo, limpia la superficie con alcohol, y pinta con laca vitral, creando el paisaje y los textos o elementos. Deja secar al menos un día sin mover, y luego finaliza pintando el marco con esmalte o látex acorde al resto del diseño. Luego, simplemente coloca nuevamente las hojas de los cristales en su sitio.

Si deseas, puedes hacerlo con cortes de vinilo decorativo. En las librerías más completas hallarás vinilos o papeles plásticos de contacto que puedes recortar a tu gusto, e incluso complementar con detalles realizados en rotulador indeleble del color adecuado. Coloca los cortes adhiriéndolos en la cara interna, para que el clima no los afecte con el tiempo.

La tercer manera de lograr esta decoración es hacer una captura de pantalla del entorno que quieres reproducir y enviarla a imprimir a un taller de imprenta, en el tamaño adecuado, y especificando la impresión en material plástico autoadhesivo translúcido, para aprovechar la luz natural y maximizar el efecto decorativo de esta pieza. Luego aplícala sobre el policarbonato o sobre el cristal de la ventana, y da los toques finales con rotuladores indelebles del color adecuado, a tu gusto.