El primer día de trabajo es muy importante, pues será nuestra carta de presentación con nuestros colegas y superiores, y querremos dar una primera buena impresión. Además, el primer día nos posibilitará entender a grandes rasgos cómo es el funcionamiento de la empresa, cómo debemos actuar dentro de ese nuevo espacio, y cómo podremos lograr adaptarnos a nuestras nuevas tareas en la oficina.
De más está decir que sentiremos nervios y mucha excitación al mismo tiempo. Sin embargo, si nos nutrimos con un par de consejos para ir bien preparados a nuestro primer día en la oficina, podremos hasta recordarlo con gusto.
En primer lugar, es indispensable que nos informemos. Podemos investigar por internet datos sobre la nueva empresa, su historia, especificaciones de su organización y funcionamiento, opiniones sobre ella, etc., que nos servirán para comenzar el primer día más seguros.
Si queremos dar una buena imagen profesional, lo más importante es ser puntuales, ya que así estaremos mostrando nuestro interés. Cerciorémonos de llegar por lo menos cinco minutos antes del horario de ingreso, y preguntar dónde debemos ubicarnos para trabajar. No olvidemos saludar de la misma forma a todos nuestros compañeros de trabajo y personas que nos crucemos en el camino.
Otra recomendación fundamental a tener en cuenta es que debemos vestirnos de forma adecuada. Podemos averiguar con antelación de qué modo se visten nuestros colegas, para no desentonar con la imagen de la empresa desde el primer día. Además, así lograremos sentirnos cómodos y en armonía con el resto.
Estar preparados para tomar notas también es esencial. Debemos llevar siempre encima una libreta y un bolígrafo para anotar cualquier indicación o concepto nuevo que debamos asimilar. De esta manera, demostraremos eficiencia desde el comienzo y daremos la impresión de estar pendientes de todo. Podemos apuntar el código y la contraseña para acceder al ordenador, claves, las rutas de acceso a los ficheros que necesitemos, instrucciones en general y horarios.
También, es necesario que apuntemos los nombres de nuestros colegas y jefes para memorizarlos rápidamente. Otro punto dentro del sondeo del ambiente laboral es ubicarnos espacialmente: debemos conocer y memorizar los lugares que frecuentaremos como el despacho de nuestro jefe, la sala de reuniones, la cafetería, los baños, el lugar donde están las fotocopiadoras e impresoras, etc.
Por último, nunca debemos tener miedo a preguntar. El primer día es óptimo para esclarecer nuestras dudas, por eso mismo, es necesario que busquemos respuestas y ayuda en nuestros compañeros y jefes, quienes estarán más que dispuestos a cooperar y explicarnos lo que haga falta. Nunca olvidemos sonreír, ya que esto inspira confianza y nuestros colegas se sentirán más cómodos a la hora de acercarse a nosotros.