En las entrevistas laborales suele haber dos tipos de preguntas: las preguntas frecuentes o generales, que se hacen para cualquier puesto, y las preguntas especÃficas relacionadas con la vacante a cubrir.
Las primeras están dirigidas a descubrir las fortalezas y debilidades del entrevistado, su carácter y personalidad, verificar su comportamiento y actitud. Las segundas, tiene como objetivo determinar si los conocimientos y habilidades de una persona son suficientes para el puesto al que aspira.
Entre las preguntas frecuentes encontraremos varias sobre nuestro empleo anterior. En este caso, debemos hacer una salvedad: no es lo mismo haber dejado un empleo y estar buscando uno, que tener un empleo y estar en la búsqueda para mejorar nuestras condiciones profesionales o económicas. Según la situación, deberemos evaluar con cuidado las respuestas que daremos.
Si hemos sido despedidos, debemos responder con sinceridad acerca de la causa: recorte de presupuesto, falta de habilidades suficientes para el puesto, problemas personales, etc. Salvo en el primer caso, en que nada ha dependido de nuestra conducta o conocimientos, en el resto de las situaciones debemos poner énfasis en el hecho de que reconocemos nuestro error, hemos trabajado para solucionarlo, y nos encontramos mucho mejor preparados para afrontar una nueva experiencia.
Es conveniente escribir de antemano una respuesta adecuada a esta pregunta, para encontrar el mejor modo de explicar la situación, sin dar lugar a dudas. Nunca debemos hablar mal de la empresa anterior, o las personas que pertenecen a ella.
Si nos hemos ido por nuestra propia voluntad, también responderemos en forma sincera, ya sea que estemos en busca de mejores condiciones laborales, un mayor salario, más tiempo libre para otras actividades, posibilidades de desarrollarnos profesionalmente o, incluso, posibilidad de adquirir nuevos conocimientos.
En todos los casos, mostraremos una actitud positiva, remarcando nuestras habilidades y fortalezas, y nuestro deseo de encontrar un puesto en el que podamos contribuir tanto al desarrollo de la empresa, como al nuestro propio.
En relación a este tema, otra de las preguntas frecuentes se refiere a los motivos por los cuales aspiramos al puesto. La mejor respuesta dará a entender que creemos que es una gran oportunidad para aplicar nuestros conocimientos, o que se ajusta a la dirección que queremos dar a nuestra carrera laboral y/o profesional, o que pensamos que podemos crecer junto con la empresa, por ejemplo.
Dejaremos claro cómo nuestras habilidades se ajustan al puesto, y lo que creemos poder hacer para contribuir al buen funcionamiento del sector en particular, y la empresa en general. Â